domingo, 26 de mayo de 2013

Ley de medios y capital cultural

Estimados, en una nueva columna en el periodístico Ciudad+ (Tevé Ciudad), abordé el tema de la Ley de Medios en vínculo con el concepto de capital cultural, trayendo a la escena del debate a Vaz Ferreira, Bourdieu y Popper. 

¿Qué papel juegan los medios de comunicación en la construcción del capital cultural? ¿Inciden de manera tal que, por lo tanto,  es necesario regularlos?  Desde estas preguntas parte la columna y abre el debate para que entre todos podamos seguir pensando un tema central de nuestra agenda pública.

Pueden ver la columna aquí mismo o en el siguiente link en Youtube: http://www.youtube.com/watch?v=3m5W_vqood4

Espero sus comentarios, sugerencias, críticas y todo aquello que contribuya a seguir debatiendo, en este espacio del blog y/o en el sitio en Facebook del programa: http://www.facebook.com/ciudadmas?fref=ts y/o en mi canal en Youtube.

Ciudad + va de lunes a viernes de 19 a 20 horas por Tevé Ciudad (mi columna va los jueves sobre las 19:30). Y si no tenés televisión por cable, lo podés en vivo online -y con muy buena calidad- en: http://adinettv.com.uy/canal/69

4 comentarios:

Andrés dijo...

La columna me recuerda algunas cosas.

Una- Hace unos años una publicidad gráfica de Direct TV mostraba unos hombres-cabeza-de-ojo. El mensaje era bastante claro: el lugar que en un hombre ocuparía la cabeza había sido reemplazado por un ojo, un único ojo. Un cíclope se me ocurre mucho más humano que ese bicho. Situemos en la cabeza lo que mejor nos parezca: pensamiento, decisiones, voluntad, libertad, creatividad, gusto, deseo, amor, sentido... Todo eso había sido sustituido por el ojo desnudo y monstruoso. Recuerdo que me recuerda los hombres-cabeza-de-bebé de una publicidad de playstation. Se puede ser más explícito?

Otra- Algo que expresa Vargas Llosa a cerca de la civilización del espectáculo (http://letraslibres.com/revista/convivio/la-civilizacion-del-espectaculo). Sandino Núñez habla de que el medio-TV está herido. Se me ocurre que la herida es más profunda, y que tal vez el medio es un ojo que muestra esa herida, la expone impúdicamente. Nuestra civilización se puede medir en la cantidad de basura que produce y también en la cantidad de aburrimiento. Hay que darle de comer a esa criatura!

Walter Guinovart dijo...

Comparto lo dicho en el programa acerca del capital cultural. Pero si ese concepto está presente en el diseño de esta Ley de Medios, no me queda del todo claro porque se le otorga al Ministerio de Industria, Energía y Minería la competencia para fijar la política del Estado en torno a los medios.
Pareciera ser que se hace mayor incapié en su faceta industrial que cultural.
Las industrias culturales son industrias, pero también son culturales. Si prioriza lo industrial se corre el riesgo de continuar con esa televisión trivial, superficial.
Creo que pensar a los medios exclusivamente como industriales es no salirse de esa concepción trivial o superficial.
Si se busca que los medios sean geneeradores de capital cultural, ¿no sería mejor que los aspectos culturales de la política de medios esté dirigida por el MEC?

Sofía dijo...

Por un lado parece ser que hay un "mal estructural" en la televisión, que como dijera Marshall McLuhan "El medio es el mensaje", sin embargo creo que la cosa es más compleja, y que incluso así lo entienden Sandino Núñez y Gerardo Sotelo, porque de lo contrario no estarían haciendo televisión.
El determinismo de los medios es relativo, es decir, resulta dudoso suponer una "naturaleza" o un escencialismo inherente a las cosas.

Creo que buena parte del problema es que muchas veces "los intelectuales" o por decirlo de otra manera, la gente con cierto pensamiento crítico le ha dado la espalda a la televisión. Es muy común encontrar que los universitarios hay muchos que no miran la tele, entre los que me incluyo. Este gesto de rechazo es un alejamiento que equivale a querer tapar el sol con un dedo.
Alejarse de la televisión por ese prejuicio naturalizado de que la "tele es basura" hace que la tele siga siendo basura.

Entonces para empezar creo que deberíamos desnaturalizar ese prejuicio y empezar a ver la televisión como una herramienta, que si bien puede ser cierto que cierta "estructura" del medio esté orientada hacia el entretenimiento, también lo es la idea de que el entretenimiento pertenece al ámbito cultural y que puede tener un carácter "educativo".

Un aspecto que complejiza mucho más la cuestión es lo que refiere a la publicidad y a toda la noción de la "industria" de la televisión. Este aspecto económico es crucial para entender el problema de la regulación de contenidos.

Finalmente creo que habría que ser cautelosos con el papel que se le otorga al Estado en todo esto: ¿Qué implica que sea el Estado quien regule los contenidos? ¿Cuáles son los riesgos y los beneficios? ¿Sería viable pensar en una entidad autónoma, para que la regulación no dependa del gobierno de turno?

FELIPE RIOS dijo...

comparto la mayoria de las opiniones (menos las de Vargas Llosa que en ese libro en particular no hace mas que hablar de lo que no sabe).
y concuerdo con Sofía que el estado no es un actor confiable, pero por otra parte no hay ningun actor confiable en esta situacion.

por ultimo quiero decir que a mi parecer la unica forma eficaz de mejorar la educacion es mejorar los docentes.
y la unica forma eficaz de mejorar los docentes es a traves de la logica mercantil de pagarles mucho mejor y esperar que la competencia los decante.
saludos